Lanzado en el Auto Show de Chicago de 2015, el lavado de cara de la segunda generación del Acura RDX impresionó por su interior de gran lujo y sus importantes características de seguridad.
Acura presentó la primera generación de la SUV RDX de tamaño compacto en 2006. Se basó en la plataforma probada de la Honda CR-V y la mantuvo así hasta la segunda generación. Sus cualidades fueron desde el inicio de un paquete completo que incluía elementos de seguridad y confort. La segunda generación llegó en 2012 y cambió de los motores turboalimentados de 2.3 litros al V6 de 3.5 litros más suave, que lo mantuvo para todos los niveles de equipamiento.
Los cambios aplicados en 2015 fueron grandes, especialmente en el aspecto. Presentaba una nueva fascia delantera con faros LED estándar y un parachoques nuevo. La parrilla se modificó según un nuevo concepto 3D. En la parte trasera, un nuevo juego de luces traseras y un nuevo parachoques mejoraron la apariencia desde atrás.
En el interior, el conductor recibió una pantalla TFT de 4,2” en el cuadro de instrumentos. El nivel de equipamiento superior, llamado Advance, recibió el paquete de seguridad AcuraWatch como estándar, mientras que estaba disponible como opción en las otras versiones. Incluía Lane Keep Assist, Adaptive Cruise Control, Collision Mitigation Braking System y cámara trasera multivista con alerta de tráfico cruzado.
El motor fue renovado y recibió 6 caballos de fuerza adicionales en comparación con la versión no remodelada, alcanzando los 279 hp. Más importante fue la mejor eficiencia de combustible lograda por la versión 2016, debido al nuevo sistema de gestión de cilindros variables, que cierra los cilindros en situaciones de conducción constante. La RDX presentaba una transmisión automática estándar de 6 velocidades y tracción delantera, mientras que el sistema de tracción total estaba incluido en la lista de opciones.