El lavado de cara del último BMW M3 V8 de aspiración natural se introdujo en 2010 y tuvo que pagar el precio de la tendencia ecológica, pero en forma de M3.
Era más ecológico, pero poderoso como antes.
En 2010, la crisis económica mundial había terminado y el dinero comenzó a destinarse nuevamente a los vehículos deportivos cupé. El M3 Coupe, como una de las mejores opciones en el segmento premium, tenía que venir con algo más que antes. Y trajo un aspecto ligeramente renovado y algunas versiones especiales.
Para la parte delantera, el automóvil presentaba una parrilla de riñón negra a diferencia de la cromada de la versión sin renovación. En el lado inferior del parachoques delantero, había una extensión de labio de fibra de carbono disponible. En el lateral, había una nueva opción para el diseño de llantas de aleación ligera.
En el interior, hubo algunas modificaciones sutiles al ya muy apreciado diseño. En el grupo de instrumentos, se instalaron 8 luces LED de cambio en la parte superior de la caja del tacómetro. El panel de control de la unidad de clima recibió los botones de los asientos con calefacción, que se colocaron más abajo en la versión sin renovación.
Para reducir las emisiones de CO2, el M3 2010 se equipó con un sistema start-stop, que funcionaba tanto en la transmisión manual como en la automática. Se introdujo el paquete de competición y ofrecía configuraciones de amortiguadores ajustables, para aquellos que estaban probando sus autos en una pista de carreras.