Fue el movimiento audaz que nadie pensó que iba a marcar tendencia hace más de una década cuando BMW lanzó la primera generación del X6.
Al SUV-Coupe (llamado por los bávaros Sport-Activity-Coupe) le siguió una década después más de un competidor. Pero la verdadera estrella del segmento SUV-cupé fue y seguirá siendo el X6. En 2019, BMW decidió venir con una nueva generación. Ahora es aún más audaz y cruel. Como ventaja adicional, los bávaros agregaron algo de brillo al equipar el auto con llantas de 22” y luces en la parrilla delantera.
En el interior hay espacio para 5. La primera generación tenía 4 asientos individuales de serie, los de atrás estaban divididos por una gran consola central.
Debajo del capó, BMW ofrece motores de gasolina y diésel, todos turboalimentados. La versión “más lenta” tiene 265 hp y puede hacer un 0-100 kph (62 mph) en menos de 7 segundos, mientras que el X6 M Competition de gama alta puede alcanzar los primeros 100 kph (62 mph) en solo 3.8 segundos debido a sus 625 hp y sus masivos 750 Nm (553 lb-ft) de torque.
Desde que se lanzó la nueva generación bajo nuevas reglas de conectividad, la evolución del sistema de infoentretenimiento es masiva. Del anterior iDrive con botón giratorio al BMW Live Cockpit Professional hay un gran salto. Además, hay un asistente personal de inteligencia artificial que puede recibir un nombre personalizado para que el conductor no tenga que decir “¡Hola, BMW!” cada vez que quiere una orden. Dos pantallas de más de 12” están disponibles para el cuadro de instrumentos y la pantalla principal. Por supuesto, es compatible con Android Auto y Apple CarPlay.