Para 2013, Citroen le dio a la línea de hatchbacks pequeños C3 una pequeña actualización, sutil pero lo suficientemente elegante como para que el auto se vuelva a notar.
Los cambios hacen que el auto se parezca un poco al C4 más grande. Los franceses también agregaron una tira de LED debajo de los faros para insinuar su último monovolumen, el Picasso. Pero quizás el cambio más atractivo realizado aquí es la introducción de un par de motores de gasolina de 3 cilindros PureTech con una cilindrada de 1.0 o 1.2 litros. Ambos motores procedían del coche hermano Peugeot 208 y el más pequeño de los dos genera emisiones de CO2 justo por debajo de los 100 gramos por kilómetro.