Ford presentó una versión muy renovada del modelo EcoSport en 2017, que transformó por completo el automóvil.
La primera generación de la EcoSport se diseñó y produjo en Brasil y se vendió bien, pero solo estuvo disponible en unos pocos países. Luego, para la segunda generación, Ford la produjo en más lugares e hizo que la EcoSport estuviera disponible en más países, incluida Europa. No era precisamente lo que los europeos buscaban en un crossover de tamaño pequeño hasta 2017, cuando la marca del óvalo azul presentó la versión renovada.

Con un diseño muy mejorado, el EcoSport 2017 presentó una nueva fascia delantera con una parrilla inspirada en la línea europea de Mondeo. Sus faros angulares, inclinados hacia atrás a los lados, y las señales de giro montadas en las esquinas hacían que el pequeño crossover pareciera más agresivo. A los lados, la línea de cintura ascendente estaba adornada con una línea cromada hacia los pilares C. La única característica antigua que no se pudo volver a trabajar fue la puerta trasera, que tenía bisagras laterales.

En el interior, Ford preparó un interior moderno con un sistema de información y entretenimiento SYNC en la parte superior de la consola central. Su volante de tres radios con botones también era nuevo. El fabricante de automóviles instaló una pantalla TFT entre el velocímetro y el tacómetro para la computadora de a bordo en el panel de instrumentos. Como compartía su plataforma con el Fiesta, no tenía una distancia entre ejes larga, pero aun así ofrecía suficiente espacio para los pasajeros traseros.

Debajo del capó, Ford instaló motores modernos, incluido el premiado EcoBoost de 1.0 litros. Ya no era un automóvil solo para los mercados emergentes.