La tercera generación del Santa Fe pasó de una apariencia aburrida a una apariencia más audaz con una gran parrilla en el frente.
Pero mantuvo sus valores originales de asequibilidad y comodidad.

Tenía asientos para hasta siete pasajeros y características que se podían encontrar en los SUV más caros del mercado. El Santa Fe era un automóvil confiable según las encuestas de JD Power y, con la elección del color adecuado, se parecía más a un vehículo premium.

La apariencia agresiva en el frente podría no ser la elección correcta para un SUV familiar, pero esa era la tendencia cuando se lanzó en 2012. La parrilla grande presentaba tres líneas horizontales cromadas barridas hacia atrás en los costados, para combinarse bien con la fascia delantera. . En el parachoques, los grandes faros antiniebla se colocaron inusualmente altos para tales características, y la línea de cintura ascendente daba la impresión de agilidad.

En el interior, dependiendo del nivel de equipamiento, Hyundai decidió instalar una nueva unidad de información y entretenimiento con cámara de marcha atrás, navegación y un sistema de sonido decente con puertos USB, entrada AUX y conexión Bluetooth. La conectividad con el teléfono móvil se ofrecía desde el nivel de equipamiento base.

El Santa Fe se ofreció con una variedad de motores diésel y gasolina, según el mercado. Mientras que la elección principal en Europa era la unidad diésel de 2,2 litros, en otros mercados había una elección más amplia de motores de gasolina. En su versión superior, estaba equipado con un potente V6 de 3,3 litros que ofrecía 290 CV. Dependiendo de la versión, el Santa Fe 2012 estaba disponible con un sistema de tracción en 2 o 4 ruedas. Pero todos ellos presentaban suspensión independiente en las cuatro ruedas.