Era el automóvil más caro del mundo cuando se lanzó y se volvió muy deseable debido a sus cualidades de carretera, la postura y el lujoso interior.
Algunas de las personas más conocidas del mundo compraron un 300 Roadster. Entre los clientes del 300 figuraban personajes como el Sha de Irán, el rey Gustavo de Suecia, Gary Cooper, Yul Brenner o Maria Callas. El coche se basaba en el ya suntuoso chasis de la serie 300 de gama alta. Fue nombrado: “Coche de la élite mundial”.

Los guardabarros delanteros grandes y curvos incorporaron los faros redondeados. La parrilla alta y plateada se encontraba detrás del parachoques delantero cromado. Había dos versiones descapotables para el 300: el Cabriolet y el Roadster. La diferencia era que el primero presentaba cuatro asientos y el segundo presentaba una capota blanda totalmente retráctil, detrás de los dos asientos delanteros.

La tapicería de cuero se instaló de serie, pero las costuras y la lista de opciones era larga. Su interior fue diseñado en función del encargo. En 1955, se introdujo una ventana giratoria en la versión 300 Sc.

El motor era un seis cilindros en línea de 3.0 litros alimentado por tres carburadores Solex de tiro descendente y la potencia de salida era de 150 hp. Estaba acoplado a una transmisión manual de cuatro velocidades, con la palanca de cambios en la columna de dirección. En 1955, el 300 Sc se mejoró y se instaló una unidad de inyección directa y su potencia aumentó a 175 hp. La suspensión delantera de doble horquilla y el eje oscilante trasero garantizaban una conducción cómoda.