Al igual que en sus dos generaciones anteriores, la tercera y última secuela de la saga Vectra estaba disponible en tres formas de carrocería, siendo la versión GTS la de formas más deportivas.
Opel fue muy apreciado en el mercado europeo y el Vectra fue uno de sus productos más vendidos. Estaba disponible en tres formas de carrocería en sus dos generaciones anteriores: un sedán, una camioneta y un hatchback (más bien un fastback). La nueva plataforma brindaba más comodidad gracias a su nueva suspensión trasera independiente.
El exterior presentaba una nueva tendencia de diseño para sus faros delanteros, con un aspecto rectangular inclinado hacia atrás y un par de faros delanteros en el interior. Su parrilla lucía un listón horizontal y la insignia redonda en él. En la versión liftback, el Vectra presentaba una ventana trasera más larga y, como habrás adivinado, una puerta levadiza. La forma GTS fue la más aerodinámica entre sus hermanos.
En el interior, la cabina presentaba asientos delanteros reforzados, hechos para las carreteras europeas y lo suficientemente suaves para viajes largos. En la parte trasera, el fabricante instaló un banco con un sistema de plegado dividido 60/40, que podía ampliar el maletero de 500 litros (17,6 pies cúbicos) a 1360 litros (48 pies cúbicos).
Opel ofreció una amplia variedad de motores bajo el capó, desde gasolina de cuatro cilindros y 1.8 litros hasta un V-6 de 3.2 litros. Dado que los motores turbodiésel atrajeron a los clientes europeos, el fabricante de automóviles instaló cuatro quemadores de aceite, que oscilan entre 120 hp y 177 hp.