El Grand Vitara era la versión de batalla larga del popular Vitara y ofrecía más espacio para cinco pasajeros adultos.
Suzuki produjo el Vitara como una actualización para los clientes que pedían más comodidad y un SUV asequible y relajado. La nueva gama presentaba una nueva plataforma con suspensión delantera independiente y un eje rígido en la parte trasera. Junto con la construcción de una sola carrocería, el nuevo vehículo no solo era espacioso sino también más cómodo. En 1988, el fabricante de automóviles japonés lo presentó como un techo rígido de tres puertas o un convertible de dos puertas, pero tres años más tarde, la versión más grande de cinco puertas llegó a mercados específicos.
El Grand Vitara/Escudo mantuvo la misma fascia delantera que su hermano de tres puertas, con faros rectangulares y faros rectangulares. Su parrilla de tres lamas con marco cromado estaba disponible para la versión de opciones completas, junto con moldes de plástico envolvente de color claro. Suzuki instaló guardabarros traseros ensanchados para la parte trasera del automóvil, extendidos sobre las puertas traseras. A pesar de que el automóvil era lo suficientemente largo como para acomodar la rueda de repuesto dentro del maletero, el fabricante de automóviles japonés todavía la mantuvo montada en la puerta trasera.
Por dentro, los asientos delanteros y el salpicadero eran similares a los de la versión de tres puertas, pero la parte trasera era diferente. Como era de esperar, gracias a su distancia entre ejes más larga, el automóvil ofrecía más espacio para las piernas de los pasajeros traseros.
Debajo del capó, Suzuki ofreció al Grand Vitara una selección de cuatro motores, según el mercado. La más inusual fue la versión de gasolina V-6 de 2.0 litros, que se ofreció en Vietnam e Indonesia, donde ese desplazamiento generó impuestos más bajos.