La historia del Prius se remonta a 1997, cuando se vendió el primer automóvil en Japón.
La venta en todo el mundo comenzó en 2001.
El Prius completamente rediseñado se recreó como un híbrido más grande, más potente y refinado con una eficiencia de combustible mejorada.
El diseño aerodinámico junto con el inusual interior hicieron que el Prius fuera único.
Se utilizaron materiales de buena calidad para la cabina, con controles agradables e intuitivos. Toyota usó indicadores digitales no convencionales que eran fáciles de leer.
Estaba disponible un sistema de navegación opcional y la pantalla habría mostrado principalmente el monitor de energía y consumo de combustible.
El Prius no era un híbrido enchufable, tenía un motor de 1.5 litros que desarrollaba 76 hp y estaba acoplado a una transmisión variable continua.
El híbrido inteligente funcionaba con gasolina, con el motor eléctrico o con ambos al mismo tiempo, según la situación.
En cuanto al espacio, el Prius se sentía cómodo con una cantidad decente de espacio para las piernas y la cabeza tanto en la parte trasera como en la delantera. El baúl tenía un área de carga de excelente tamaño e incluso podía extenderse abatiendo los asientos traseros.
La experiencia de manejo fue buena, con el Prius sintiéndose más como cualquier otro sedán. Alcanzaba los 100 km/h en poco más de 10 segundos.
Toyota dio una garantía de 8 años para las baterías.