Construido para los países del Este, el Toyota Vios del segmento B de tercera generación se lanzó en marzo de 2013, y solo a simple vista se podía decir que es un automóvil más maduro que los modelos anteriores.
La placa de identificación “Vios” vino de la palabra latina “vio” que significa “avanzar”.
Su diseño era bastante interesante, con un morro en forma de V y una gran parrilla trapezoidal, faros polarizados y grandes áreas oscurecidas que le dan un aspecto más audaz. Otro cambio visual y funcional importante es que los faros tenían proyectores de luz en lugar de las clásicas bombillas con reflector. Este sedán económico es bastante grande para su clase, mide 4410 mm de largo y 1700 mm de ancho.
El interior está rediseñado, con líneas nítidas y amplias y con el grupo de instrumentos montado detrás del volante. Cuenta con un diseño deportivo de tres bitácoras con retroiluminación roja, mientras que las pantallas y los botones de la consola central están iluminados en azul.
Toyota siempre basó su trabajo en el concepto de no reemplazar lo que no está roto, sino mejorar para mejorar, por lo que sus autos se compraron principalmente por confiabilidad más que por apariencia. Por supuesto, el Vios no se veía mal, simplemente no era un auto hermoso, pero los compradores contaban con él para llevarlos de A a B sin mucha molestia.
El motor de gasolina con tecnología VVT-I incluida entregaba 109 hp y conducía el auto a un máximo de 171 km/h. El Vios tardó 12 segundos en alcanzar los 100 km/h. El motor estaba acoplado a una transmisión automática de 4 velocidades.