La segunda generación de Renault Megane recibió un lavado de cara en 2006 cuando el fabricante de automóviles francés actualizó tanto el diseño como las especificaciones técnicas del automóvil.
La apariencia se mejoró con faros rediseñados y un parachoques delantero remodelado que ahora brinda una apariencia más moderna y elegante. También se mejoró el sistema de suspensión y se redujo el número de configuraciones del motor, que ahora oscila entre el 1.4 16V y el 2.0 dCI. El motor tope de este modelo era un 2.0 litros 16V turbo que desarrollaba 165 caballos de fuerza y una velocidad máxima de 136.7 mph, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 8.3 segundos.