La cuarta generación del M3 y la tercera generación del M3 de cuatro puertas se introdujeron en 2007 y fueron el punto de referencia en el mercado de los sedán deportivos.
Era el coche a batir.

La historia del M3 comenzó en los años 80 con un automóvil construido para la calle para recibir la aprobación de tipo de la FIA para la pista. El exitoso E30 M3 se fabricó únicamente como vehículo de dos puertas y su sucesor, el E36 M3, recibió una versión de cuatro puertas. Después de eso, todos los demás M3 estuvieron disponibles así, así como cupé o convertible.

El sedán M3 era fácil de diferenciar de un sedán estándar. En la parte delantera, había un parachoques nuevo con una rejilla más grande en el centro y dos deflectores de aire a los lados. El capó presentaba un bulto, necesario para dejar espacio para el motor más grande. Desde el costado, se instalaron nuevos espejos exteriores y en la parte trasera, se revelaron cuatro escapes colocados más cerca del centro debajo del parachoques.

En el interior, el automóvil presentaba los tres colores de Motorsport GmBH: azul, azul oscuro y rojo, cosidos en la tapicería, en el volante y en el grupo de instrumentos. También se mostró el logotipo de M3. Los asientos bacquet para los pasajeros delanteros ofrecían un alto nivel de agarre en las curvas a sus ocupantes.

Pero la magia del M3 estaba debajo de su piel. Un motor V8 de 4.0 litros en la parte delantera enviaba su potencia a través de una transmisión manual de 6 velocidades o una caja de cambios automática de 7 velocidades (doble embrague). El automóvil fue más rápido a 100 kph (62 mph) por 0,2 segundos cuando estaba equipado con la caja de cambios automática. El equilibrio perfecto y la distribución del peso otorgaron un gran nivel de velocidad en las curvas.